15.05.22 — Diario
Madrid huele regular
Aquí os traigo otra entrada de blog breve para poneros al tanto con todos los acontecimientos cada vez más frenéticos de mi vida. Hoy volvemos a Madrid tras un viaje a Asturias para celebrar mi cumpleaños. Empezó mi vuelta a la ciudad con algo de bajón, me enfermé con un virus durante unos días (no fue el gran bicho otra vez, menos mal) lo cual me tenía encerrado en casa.
Cuando yo ya me encontraba algo mejor, el clima también, con lo cual pude ver el segundo día de los dos que suponen la primavera madrileña – os juro que cada año pasamos de frío seco a calor inaguantable en un finde. Este calor trae consigo unos olores bien interesantes que han inspirado el título de esta entrada de blog…
No quería hablar mal así de mi querida ciudad, así que he de admitir que estoy siendo un exagerado. En realidad, el mejor tiempo ofrece la oportunidad de pasar las tardes con amigos y dando vueltas por mis barrios favoritos de Madrid.
Con estas tres fotos, hago un breve resumen de una semana que pasé viendo a amigos, comiendo unos scones británicos en una caferería que me enseñaron, comiendo carne a la brasa ilimitada en un restaurante cerca de mi casa y hasta una tarde que pasé en la casa de Luis haciendo un plato casero de curry. ¡Ha sido un sin parar!
Hablando de sin parares, escribo esta entrada de blog desde el extranjero otra vez – mi propósito de año nuevo de viajar más está cogiendo más peso que otro que me puse que era empezar a ahorrar algo de dinero. Bueno, he decidido que no se puede hacerlo todo y que tengo que aprovechar del poder viajar tras dos años de restricciones.
Pero ya os contaré más de esto en la siguiente entrada de blog, ¡en la cual hablaré del sitio donde actualmente me encuentro!